Corta las salchichas ya cocidas por la mitad, luego inserta un palillo en el centro de cada salchicha, deja que la punta del palillo pase por el principio de la salchicha y luego retroceda un poco. Repite este proceso con todas ellas y resérvalas.
En un recipiente coloca el huevo, la sal, la margarina derretida y mezcla bien.
Añade la leche y la harina ya mezclada con la levadura, mezcla bien hasta que sea homogénea.
En una olla pon el aceite para freír, suficiente para cubrir el bocadillo, enciende el fuego a temperatura media-baja y deja que el aceite se caliente.
Pasa la salchicha por la masa y cúbrela por completo.
¡Fríe! Se freirá muy rápido, ¡así que no lo pierdas de vista!
Utilice una espumadera para ayudar a que el bocadillo se fría por todos los lados.
Repite el proceso con todos y sirve.