Crema de leche condensada y Laka
Montaje
Taza: 200 ml
En la batidora, coloca los huevos y el azúcar, bate hasta que se mezclen y se vea más claro. Añade el aceite y bate. Con la batidora en marcha, añade poco a poco la leche.
Mezcla el chocolate en polvo y la harina en un bol y añade poco a poco esta mezcla a la batidora.
Engrasa un molde con harina y mantequilla, vierte la masa y hornea a 180 grados durante 45 minutos (haz la prueba del palillo).
Para hacer la crema, pon en una olla, la leche condensada y la fécula de maíz, mezcla los dos ingredientes hasta que se integren, añade la nata y el chocolate blanco, mezcla bien a fuego medio hasta que espese.
Pon el relleno en un bol, cúbrelo con papel de plástico o una bolsa y resérvalo hasta que esté a temperatura ambiente.
Corta la masa del pastel por la mitad y haz una pequeña mezcla de leche y leche condensada para mojar el pastel.
Pica las fresas y añádelas a la masa, añade toda la nata encima de las fresas y extiéndela bien, pon la otra mitad de la masa encima, mójala y cúbrela con una bolsa de plástico y refrigera durante al menos 4 horas.
Haz una ganache y viértela sobre el pastel.