Comienza cortando las ciruelas en trozos más pequeños.
Luego, en un bol, coloca la avena y las ciruelas picadas, añade la leche de avena y mezcla todo muy bien.
Pon a un lado y déjalo reposar durante 10 minutos.
Mientras tanto, tritura bien un plátano, agrega el cacao y la canela en polvo, mezcla bien.
Vierte la mezcla de cacao y plátano en la avena, mezcla bien.
Transfiere todo a recipientes más pequeños.
Cubre los recipientes con una envoltura de plástico y guárdalos en el refrigerador durante 24 horas.
El otro día, antes de sacar el postre de la nevera, en un bol ponemos la leche en polvo, un poco de agua caliente y mezclamos bien hasta que se convierta en leche condensada.
Vierte la mezcla sobre la avena y termina con trocitos de nueces al gusto.
Sírvete.