En un bol mediano, empieza por añadir 4 pazocas en bastón y con la ayuda de un tenedor, machácalos bien.
Añade la leche condensada sobre las pazocas y vuelve a mezclar todo bien.
Ahora, en otro bol, añade la crema de leche fría y bátelo todo con una batidora hasta que alcance picos firmes.
Pon toda la mezcla de pazoca en este bol con la crema de leche y con una espátula, mézclalo todo muy bien hasta que quede homogéneo.
Una vez hecho esto, vierte toda la mezcla en una fuente de horno de 17 cm y pon encima las 4 últimas pazocas trituradas para decorar.
Por último, pon la crema de avellanas en las cuatro esquinas de la fuente de horno y, con un tenedor, mézclala ligeramente y métela en el congelador hasta que se convierta en helado.
Sírvelo enseguida.