Comienza haciendo cortes superficiales en el filete de salmón, en diagonal y en diagonal inversa.
En una sartén grande, a fuego medio-bajo con aceite vegetal caliente, añade el filete de salmón y fríe hasta que esté ligeramente dorado, bañándolo con el aceite.
Retíralo de la sartén, córtalo en tiras y resérvalo.
En otra sartén grande, a fuego medio-bajo, añade un chorrito de aceite de oliva.
Agrega la cebolla y el pimentón cortados en tiras y sofríe hasta que se ablanden.
Luego, añade los champiñones cortados en trozos más pequeños y las hojas de espinaca.
Sazona con sal, pimienta negra y ajo en polvo, y sofríe por 2 minutos más.
Agrega la crema de leche y el agua, y mezcla.
Después, añade el salmón, sazona con un poco más de sal y pimienta negra.
Agrega el limón cortado en rodajas, tapa la sartén y cocina durante 10 minutos.
¡Sírvete y disfrútalo!